La narración de un viaje

9/10/2014

John Berry un británico periodista necesita conocer la cultura y tradición de Australia para un articulo, así que viajara desde

Inglaterra a Oceanía. Paso un mes desde que le dieron la noticia de tener que viajar así que empezó a prepararse:

compro los billetes, estudio la lengua, busco en internet mapas, guías turísticas, etc...

A la semana siguiente embarco, era un barco de clase media, solo había extranjeros lo que mejor recuerdo fue un camarero amable que me recomendó no probar la comida. La cosa fue que en unas horas les empezó a sentar mal y la mayoría vomitaron pero eso queda atrás.

Tuvimos que desembarcar en Noruega de allí tome un avión planee casi 72 horas; la azafata era muy amable nos traía la comida y bebida y también nos enseñaba las maniobras de emergencia, el piloto debía de ser un profesional porque al aterrizar hubieron muy pocas turbulencias.

Ya llevaba 25 días de viaje, faltaba poco, el ultimo avión que tome fue en la India y esté me llevaría directo a mi destino Australia.

El transbordo fue rápido lo que más me llamo la atención fue que casi que no te pedían documentación lo cual no me parecía del todo bien pues yo llevaba tiempo preparándola para lo imprevisto y perdí mucho tiempo en aquello la parte positiva es que así tarde la mitad de tiempo que en otras muchas fronteras y eso me alegra ya que llevaba tiempo sin descansar en paz y estaba a punto de llegar a mi destino estaba eufórico.

Y al fin llegue, pasaron 28 días, estaba muy cansado pero llegue eso es lo importante.

Tome fotos, vídeos, escribí mi articulo e hice mi reportaje y volví a Inglaterra mi casa, mi hogar.

Pero esa es otra historia que mejor no contar.